Me es incierta la navidad, no la entiendo. No comprendo por qué tanta algarabía por esta fecha de este mes. Los regalos, la comida, las vacaciones, los familiares lejanos que llegan para las reuniones, los arbolitos y las esferas, todo lo color rojo y verde. Algo fuera de mí lo acepta y hasta lo tolera, pero dentro de mío, un lobo furioso asecha y persigue a ese sentimiento de sembrina que quiere apoderase. La navidad es sangre sobre nieve de los bosques.
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