SE BUSCA EXORCISTA.

Endemoniado me dicen, adefesio, me señalan y escupen el camino que piso, que no sigo la línea y no me persigno ante las iglesias.

Monstruo de los Infiernos me gritan, por no optar por sus reglas, por no vestir como visten y por no amar como aman.

Súcubo de las Tinieblas, oigo en las calles, cuando bailo con las rosas, cuando corro alcanzando el viento, cuando vivo como quiero.

Bestia sin Nombre me señalan, que ando como loco, que me mojo con la lluvia, que hablo con extraños y mi amante es la nada.

Engendro de Dragones, por ahí me dicen, por hablar con certeza, por no temer al mañana, por reír a carcajadas, por ser hombre honesto.

Hijo de Satán me advierten, no llegaras al cielo, no mereces la gloria, que calamidad eres, que paso para que te mereciéramos.

Maldito seas, no bastan, para qué escriba lo quiero, para declararme dios mismo, para señalar ante la gente, para vivir mi vida.

Alma Perdida escucho, cuando ayudo a los enfermos, cuando hablo con los locos, cuando consuelo a los asesinos.

Ángel de Muerte me señalan, por preferir amistades inconvenientes, por rodearme de gente mala, por ser buen amigo.

Endiablado me tachan, los que no comprenden mi inteligencia, los que no me conocen, los me envidian y los que no miran de frente a la vida.