miércoles, 6 de mayo de 2009

DEJAD QUE LOS NIÑOS SE ACERQUÈIS A MI, PUES PARA ELLOS ABRIRÈ, UNA PUERTA EN EL INFIERNO.


Debí haber escrito este pensamiento el treinta de abril. Pero no pude. Me dio flojera, no tenia dinero, me dio un poco de pena, sentí dolor, nauseas, amor, odio, hambre y unos piquetes entre los dedos de los pies en la pierna izquierda. No recuerdo el por que de todos estos sentimientos y enmarañadas, pero lo que si recuerdo es que no lograba concentrarme, ni siquiera para por lo menos, plasmar (todas estas estupideces) en una hoja de papel. Lo que si logre fue encabronarme, y logre esta hazaña debido a que afortunadamente (para mis musas y no para el protagonista de este malogrado evento) pasaba por mi frente. Les contare lo que vi.

MAMÀ + NIÑO (que caminaban por la calle) + TROPIEZO DEL INFANTE (que iba sujetando la mano de su progenitora) = MOLESTIA DE LA MADRE QUE DESENCADENA UNA PALIZA CONTRA EL VULNERABLE CUERPO DE SU CRIATURA.


Esto logro sacarme por un breve momento de mis casillas, pero por suerte, en mi dado de la vida volvió a caer seis, y continué para terminar mi recorrido de la Oca. No, no es cierto. No continué, me detuve y contemple de esta manera un poco atroz, la infancia que viven algunos niños. Los niños que nos rodean. Me llene de miedo al pensar que algunos chiquillos tienen tratos peores a los que presencie, que son abusados, que no son escuchados, que no logran liberarse, que no tienen opciones, que no tienen nada, que viven poco, que mueren, que no sueñan, que son manipulados, y conforme llenaba, poco a poco, una larga lista de estas funestas elecciones infantiles, me di cuenta que la infancia es un periodo corto que dura poco, pero que a veces nunca existe.

1 comentario:

Salazar Craft dijo...

Curiosa aritmética de los eventos.
Haz dicho bien, la infancia es un periodo muy corto, pero aveces nunca existe, y otras, igual de graves, dura para siempre.
¿A qué te recuerda esto?

Horresso