“Este articulo lo encontré como prologo editorial en una revista de deportes extremos, y puedo agregar, que comparto la total opinión del escritor. Y yo, lo único que puedo añadir, es que sin duda, la libertad de las letras y de opinión es lo mas grande y sublime con que pueda contar el ser humano.”
Sin más aquí lo tienen:
Desde hace tiempo he venido escribiendo aquí reflexiones, debrayes y pendejadas. Cosas, en suma, que me salen de los huevos. Puedo hablar (escribir) de cualquier cosa, a si que no tengo mas que sentarme frente a la computadora y darle al teclado. A veces se me antoja hablar de política; otras de religión. O de sexo. Todo depende del humor en que me encuentre. Algunas ocasiones estos textos resultan medianamente interesantes, otras no tanto y otras son vil basura. Sin embargo, debo aclarar debido a resientos mensajes, en las cuales se refutan mis ideas, se me invita a polemizar o simplemente se me mienta la madre, que en ningún momento he pretendido hacer de este espacio un pulpito desde cual pontificar, imponer puntos de vista o manipular a los lectores. Lo que escribo es únicamente un punto de vista sobre determinada situación. MI PUNTO DE VISTA. Nadie debería tomarlo demasiado en serio. Ni mucho menos tratar de hacerlo extensivo para todos. No me interesa entrar en polémica con nadie. Ni responder insultos anónimos. ¿Qué chingo a mi madre? Ok, la chingo. Nunca he tratado de convencer a nadie de que lo que yo pienso es la neta. Francamente me daría hueva siquiera intentarlo. Me importa un carajo si alguien quiere matar a los emos o a los que su chingada gana les pegue. Si están a favor o en contra del aborto. Si son panistas o perredistas. Católicos o musulmanes. Feas o bonitas. Estúpidos o inteligente. Para mí, en esenia, todos los seres humanos somos iguales: un montón de huesos, musculo, mierda y gansitos marínela. De tal suerte que ¿Por qué habría de interesarme si esta sociedad vive o muere? ¿si esta civilización decadente se colapsa de una buena vez o se mantiene en pie unos cuantos años mas? Da lo mismo. No somos tan importantes. Al contrario. ¿Saben que –quienes- ha provocado el calentamiento global? El planeta agradecería si a la raza humana se la cargara la chingada. Tuvimos nuestra oportunidad y la desperdiciamos. Es tiempo de que otra especie asuma el ando. Quizá, entonces, vengan tiempos mejores…
Maldecido por: CARLOS A. RAMIREZ.
