viernes, 31 de diciembre de 2010

¡¡¡ VIVAN LOS AMOS DE LA BLOGOSFERA !!!


Somos los integrantes de un mundo de letras y poema.
Somos los dueños de nuestro propio espacio de novelas al servicio de un clic.
Somos los creadores de sueños, olvidos, enajenaciones, relatos, pesadillas, o simples aventuras.
Somos los manipulantes de un globo lleno de aire lúdico.
Somos las plumas cibernéticas que te provocan placeres al tocarte.
Somos los ojos que nunca miraran nuestras propias creaciones.
Somos los inconformes de un mundo fotografiado.
Somos los destinatarios de mensajes que nunca serán leídos.

Amigos tejedores de la blogosfera.
Antes de que este año termine.
YO LOS SALUDO.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN...

Todos, por estas fechas, quieren dar y recibir, materiales brillantes, plásticos de muchos colores y un sin numero de objetos que tienen el valor que queremos darle... pero nadie comparte con los suyos, sentimientos sin valor, objetos unicos que nadie mas podria siquiera imaginarse. Y es aqui en donde me encuentro con esta inspiradora cancion del poderoso titan de Juliantla Guerrero, un paisano que tiene en su haber innumerables canciones con letras dignas de cualquier Oda. El comparte con los suyos objetos unicos que nadie mas podria compartir: sin mas aqui se los dejo:


QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
EL CANTO DE LOS GORRIONES
QUE CANTAN PORQUE SON LIBRES
DAN CLASES EN MIS BALCONES.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
LA SERENATA DEL GRILLO
LA PLATA QUE HAY EN LA LUNA
Y REPLETA MI BOLSILLO.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
LA CARICIA DE LA AURORA
CUANDO ME BESA LOS OJOS
Y ASI DEL DÍA ME ENAMORA.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN CON ALGUIEN.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
LA CALMA DE ESA VEREDA
QUE ME LLEVA Y ME REGRESA
Y AHÍ ESPERANDO SE QUEDA
A QUE MI HUELLA SEA DOBLE
A QUE DOS VIDAS SEAN UNA
Y QUE EN UN BESO SE CALME
DE MI ALMA MI SED, MI HAMBRUNA.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN CON ALGUIEN.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
UNA MANZANA A MORDIDAS
UN AMOR SIN CUENTAGOTAS
ROMANCE SIN DESPEDIDAS.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
EL MAS FELIZ DE LOS CUENTOS
Y NUESTRA HISTORIA LA CANTEN
DE SIGLO EN SIGLO LOS VIENTOS.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN CON ALGUIEN.

QUIRERO COMPARTIR CON ALGUIEN
MI CABAÑITA DE ADOBE
CON ALGUIEN QUE ME COMPRENDA
Y LAS ANGUSTIAS ME SOBE.

QUIERO COMPARTIR CON ALGUIEN
LA CARICIA DE LA AURORA
CUANDO ME BESA LOS OJOS
Y ASI DEL DÍA ME ENAMORA
QUIERO COMPARTIR...

Maldecido por... JOAN SEBASTIAN.

UNOS CONSEJOS ANTES DE FIN DE AÑO SIN IMAGEN.

o Sean felices mientras tengan las fuerzas necesarias para serlo.
o Tengan pocas o bajas concepciones de sí mismos; en el encuentro de estas concepciones encontraran los motivos de felicidad.
o Sean guerreros, dios también quiere gente líder.
o Cuando miren a los otros, vean solo a ellos.
o No busquen amor creyendo que en él, encontraran a su alma gemela, no creo que el amor sea producto de espejo.
o Ténganse odio propio, en nivel igual al egoísmo.
o Cuando definan su nombre, dejen en esta definición, un universo ínfimo de otras posibilidades que aun no se le ocurren.
o Envejezcan con juventud.
o Cuando jueguen con un niño, se convertirán en las personas más sabias de todas.
o Tratemos a los bebes como bebes, a los niños como niños, a los jóvenes como jóvenes y a los hombres como… mejor no los tratemos.

lunes, 13 de diciembre de 2010

METAMORFOSIS IMPERCEPTIBLE Y GLACIAL.

Es el momento del cambio, de dejar la cola de anfibio y convertirse en rana.de mudar los dientes por colmillos, de olvidar los cuernos por el cerebro... es el momento de la Tundra.

Sentí frío.

Mientras mis zapatos se mojaban charco tras charco y mi cigarro se consumía en mi boca bajo la protección de ese gran paraguas, sentí frío, por primera vez en mucho tiempo. El aire soplaba con fuerza, arrastrando algunas gotas de lluvia hacia mí en horizontal, estaban frías. Seguí caminando durante algún rato. Una cara conocida, una invitación y una taza de café mal preparada en compañía de extraños. Me sentí relajado y por un momento el frío se me olvidó.


Cuando salí anochecía. De nuevo me protegí con mi amplio paraguas, de nuevo encendí un tabaco y de nuevo sentí el frío. Una visita inesperada, una charla mundana, una nueva despedida y una noche empezando con torrenciales lluvias. Me sentí inspirado, me sentí despabilado, todo el día, tuve la sensación de despertar, de abrir los ojos, de estar ahí, presente, y sonreí. Pero aún sentí el frío. Inquietante y amenazador.


El día empezaba con buena pinta, el sol reapareció tras setenta y dos horas de cobardía. Un café en ayunas y un trozo de pan. Las secuelas del huracán se empezaron a ver, pero un monzón no detiene a las personas, todos entienden que seguir adelante es lo único que pueden hacer. El día se siente tan apático, el cielo es tan azul y la gente tan normal por doquiera que miro.

Hay cosas que intento recordar para escribirlas luego, pero jamás pasa, aquello que en un momento surge se queda atrapado ahí, en el instante pasajero, como las maletas que se olvidan en el tren. Me enfurece. Mis zapatos no son los de siempre. Y me doy cuenta, más que nunca, de que no soy nada parecido a lo que era ayer, soy distinto, soy otro, y se que tengo una fijación con esta pregunta, pero caigo en la certeza de que cada vez que me levanto la respuesta cambia, a veces mucho y otras poco, pero ¿quiénes éramos antes?


Hoy algo en mí cambió, aún no descubro qué es pero lo siento, no se si será para bien o ha nacido un nuevo obstáculo, una nueva espina. Lo que se es que hay engranes en mi maquinaria que han cambiado su dirección. Las personas a mi alrededor son iguales, el edificio es más húmedo pero es el mismo. Pero siento frío. Aunque nadie usa abrigo extra, aunque nadie tirita, aunque nadie castañea los dientes, yo siento frío. Al irme de nuevo recuerdo lo que ha sucedido, añoro la lluvia de pronto y el tabaco que disfruté bajo la sombrilla, añoro un café ajeno y mal preparado, añoro mojarme los calcetines. Mi corazón late deprisa y hay una sensación que no puedo describir, es intensa, es opresiva, es explosiva y es placentera también, como un orgasmo en reversa, como una mirada ajena. En la carretera, en la banqueta, hay una cruz con un nombre que no alcanzo a leer. Tengo la fuerte sensación de ser observado desde ahí aunque no veo a nadie, creo que quien quiera que haya sido tocó algún profundo engranaje olvidado y casi oxidado. No se de que estoy hablando.

Sentí ese frío inquietante una vez más. Pero ahora sé que no hay nada, sé que no es allá afuera, es aquí, bajo mi piel donde mis huesos tiritan, donde se hiela mi sangre. El frío nace de mí. Me dejo impregnar por la sensación, explosiva, envolvente, helada, placentera, interna.

No se cómo explicar estos dos últimos días, no se que ha sido, no sé si es real o solo figuraciones mías, no logro entender qué o cómo nació este frío, o qué es lo que ha cambiado tan sensiblemente, cómo describir la impresión de ser observado por quién no está ahí. Me doy cuenta de la poca justicia que las palabras hacen a las ideas y sentimientos. Quisiera hacer entender estas palabras, pero no logro entenderlo yo mismo. Tengo mucho trabajo que hacer, en muchos sentidos…


Una parte de mí creo que sufre hipotermia, y otra ha quedado suelta, libre y se mueve.
Maldecido por: Salazar Craft.